Reforma Tributaria Colombia

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Se ha presentado el borrador de la reforma tributaria en Colombia para este año 2012. Se trata de un paso adelante en materia fiscal y buscará alcanzar a mayor cantidad de contribuyentes y productos gravados.

Por ejemplo, ya veníamos anunciando que en el caso del IVA se aplicaría para algunos productos básicos de la canasta familiar. Para el caso de plantean tres tarifas: 5, 10 y 16%.

Por otra parte, se mantiene y ratifica el planteamiento de reducir la tarifa de renta del 33 al 27%. Asímismo, se continúa evaluando una retención en la fuente del 3% para los salarios altos y cuyo tope se encuentra por definir.

Otro de los sectores afectados será el agropecuario, donde se establecerían dos tarifas de renta del 10 y 15% con el fin de reactivar el campo colombiano.

Según Echeverry, el presidente Juan Manuel Santos aprobó que la reforma tributaria fuera presentada ante el Congreso en la próxima legislatura. Se espera que esta sea radicada días después del 20 de julio.

El objetivo es que paguen impuestos quienes más ganan, ya que estas personas están pagando proporcionalmente mucho menos que los trabajadores independientes. En el país, quienes tienen un ingreso bruto mensual de cerca de $40 millones pagan un impuesto de 5% aproximadamente, mientras que quienes tienen un ingreso mensual entre uno y dos salarios mínimos pagan en promedio un gravamen de 6,6%.

En Colombia hay 20,7 millones de personas ocupadas de las cuales 4,6 millones pagan el impuesto sobre la renta y 3,5 millones son trabajadores independientes que no son declarantes.

Hay que destacar que, aunque la reforma entre en vigor este año, la mayoría de estas medidas entrarían en vigencia a partir de 2014 ya que la Dian va a ser objeto de una transformación para adaptarse a los cambios.

En cuanto al IVA, el presidente Santos descartó gravar los bienes de la canasta familiar. Se mantendrán los productos que están actualmente exentos y excluidos; así mismo, se propone dos tarifas, una general del 16% como está actualmente y otra de 5%, y un impuesto al consumo de lujo que sería de 35%.

Actualización 10 de agosto 2012

Al parecer, no habrá reforma tributaria en 2012, y así lo mantuvo el ministro de Hacienda y Crédito Público, Juan Carlos Echeverry, argumentando que: “estamos teniendo una discusión dentro del Gobierno por lo siguiente, dado que este es un año estresado internacionalmente he pensado que puede ser razonable seguir preparando la tributaria, tenerla lista, pero esperar a que el momento sea más oportuno y no necesariamente tiene que ser en el segundo semestre”.

Por su parte, la inversión extranjera directa en Colombia será mayor a la prevista este año y llegará a US$17.000 millones.

Además, la proyección del PIB para 2012 está entre el 4,5% y 4,8%, a espera de que para el segundo semestre del año la cifra mejore, teniendo en cuenta que se reactiva todo el tema de obras públicas, sector agroindustrial, entre otros.

El jefe de la cartera de Hacienda proyecta además que para 2020 Colombia tendrá 50 millones de personas y un ingreso medio de US$15.000, habrá construido 6.000 kilómetros nuevos de dobles calzadas, mantendrá diversificado su sector productivo y sus exportaciones. También señaló que para ese año el país habrá llevado su deuda pública al 10% del PIB.

Actualización 4 de octubre 2012

Tanto para la Bolsa de Valores de Colombia (BVC) como para la firma de auditoría empresarial Crowe Horwath, es importante que se realicen varias modificaciones tributarias para poder ser más competitivo en la región.

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Según informan fuentes de la BVC, para que Colombia sea más competitivo en la región, es importante mantener el beneficio tributario vigente en la negociación de acciones; establecer exenciones para no residentes y simplificar el modelo de la retención de la fuente, si es posible eliminarlo.

Y es que los impuestos son uno de los temas que más relevancia está cobrando por estos días, debido a la próxima discusión de la reforma tributaria, la cual, tal y como lo expresó el vicepresidente jurídico de la BVC, Alberto Velandia, deberá reflejar el buen momento que vive Colombia con una política que no deje pasar la oportunidad de seguir creciendo.

Es por esta razón que, varios operadores del mercado de valores han expresado que es hora que el país avance en la reglamentación que rige a la BVC, pues desde hace 15 años no se ha gestionado una renovación que se ajuste al volumen que transa esta entidad actualmente.

En ese orden de ideas, para varios analistas económicos, lo primero que se debe replantear es el impuesto de retención en la fuente, a lo que Córdoba llamó el 4×1.000 de las transacciones en bolsa, pues lo ideal sería que cada uno de los inversionistas asumiera el gravamen de sus negociaciones en su respectiva declaración de renta, de manera que la obligación fuera anual y no mensual.

Otro punto a tratar es el de los impuestos en dividendos. Debería ser una obligación tanto de la empresa como de los accionistas. Actualmente la tarifa nominal es de 33%, lo ideal es repartir este porcentaje entre el socio y la empresa, que uno asuma el 25% y el otro 8%, siendo la última, una tarifa progresiva.

Asimismo, la propuesta de reducir a un 5% el IVA a los insumos de la cadena agropecuaria no ha sido asimilada por el sector, sobre todo el pecuario, que todavía no tiene claro en el caso de concentrados para animales si se mantendrá el régimen de exento o si por el contrario pasará a excluido.

En el caso de los concentrados para animales, que representan la principal materia prima para la avicultura y porcicultura, con más del 75%, y en lechería especializada un 32%, ese 16% del IVA que hoy se aplica se puede recuperar porque está exento; sin embargo, con la reforma tributaria no está claro si se mantiene las condiciones de devolución del impuesto.

Lo que se pide es que en los bienes gravados, excluidos y exentos, sin duda el sector agro tiene una amplía participación. Con la reforma tributaria, para el caso de los bienes gravados como azúcar o aceite, no cambiaría en nada porque toda su cadena está gravada.

En el régimen de exento donde se encuentran los concentrados para animales y el etanol, hay detrás toda una cadena con productos gravados a tarifas diferenciales de los cuales al final, se solicita la devolución del IVA. En este grupo están los avicultores, porcicultores, ganaderos, productores de leche y huevo. En este sentido, el único costo que se asume es el financiero el cual depende de las demoras en la devolución del impuesto.

Así las cosas, quienes ganen entre $2’300.000 mensuales y $8 millones tendrían que aportar el 1% de sus ingresos vía renta. Los que ganen por encima de $8 millones deberían pagar el 5% y aquellos que devenguen por encima de $200 millones, tendrían una tarifa de 15%.

En la segunda parte, la reforma plantea crear un impuesto de renta de 25% para las sociedades (hoy día es del 33%). Además, ligado al primer tributo, el objetivo del Gobierno es crear un impuesto de 8% para las empresas con el que se financiará al ICBF, al Sena y a la salud.

Esto último permitirá que la carga tributaria que tiene la nómina de los empleadores (es del 29,5%), pase al 16%. Si el Congreso aprueba este mecanismo, Cárdenas prevé que se genere un millón de empleos formales en Colombia.

Adicional a esto, un tercer capítulo de la reforma busca simplificar el sistema de IVA de siete a sólo tres tarifas. Actualmente, este tributo se divide en 0, 1,6%, 10%, 16%, 20%, 25% y 35%. La idea es que exista un IVA de 0, otro de 5% y finalmente, uno de 16%. Además, el Gobierno busca que se dé vía libre a un impuesto al lujo.

Una cuarta parte quiere que a las ganancias ocasionales obtenidas por la venta de activos poseídos por más de dos años se les reduzca la carga impositiva (del 33% al 15% para sociedades y del 33% al 10% para activos).

La última parte busca taponar la venta rota del sistema tributario, con lo que se eliminaría el trato preferencial a algunas empresas en materia de exenciones de impuestos.

Recordemos que, existe ahora un nuevo Sistema General de Regalías que permite la distribución de los recursos es más equitativa y además desvirtuó el planteamiento de que con el sistema antiguo el país estaría mejor.

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