De los conceptos conbtables básicos, los de devengar y percibir suelen causar a más de uno una fuerte confusión. Aclaremos entonces este conflicto para llegado el momento, realizar correctamente los registros de egresos e ingresos.
Todos los ingresos se anotan al perfeccionarse las ventas al igual que todos los costos incurridos para su obtención se registran al contraerse las respectivas obligaciones, independientemente de los cobros y pagos que tales situaciones generan.
Las ventas del ejercicio en curso no cobradas que pasan al próximo ejercicio se presentan en el activo del balance general como “Por cobrar”, en la cuenta “Deudores por Venta”, pero el importe de tales ventas, los ingresos, se imputan a los resultados del ejercicio en curso y se trasladan al respectivo estado de resultados. Si, por el contrario, se tata de fondos entrados por cobros no atribuibles al ejercicio en curso, sino imputables a hechos o actos futuros cuya verdadera existencia se ha de verificar en el próximo ejercicio, no corresponden su registro como ingresos actuales, por no haberse devengado; se anotan en el pasivo del balance, sin que afecten los resultados del ejercicio en curso.
El mismo criterio es aplicable a los costos, en su condición de gastos cumplidos; si corresponden a operaciones del ejercicio del ejercicio en curso, aunque no se hayan pagado, se los imputa a las pérdidas; si se verifican salidas no atribuibles al ejercicio en curso si no al próximo, no corresponde su registro como costos actuales.